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Este fenómeno, ya fue detectado por los griegos, libres de la ceguera ideológica feminista, hace ya muchos siglos.
La obra de Medea (Μήδεια, Mēdeia), que ha dado nombre a este fenómeno, fue representada por primera vez el el año 431 antes de Cristo. En ella, Medea, mata a sus hijos para vengarse del padre que le había dejado por otra mujer (venganza). Este diálogo resulta relevante:
Corifeo: ¿Entonces a tu prole, mujer, vas a matar?
Medea: Sí, porque es lo que más dolerá a mi marido.
Corifeo: Pero infelicidad suma en ello te causas.
Medea: ¡Ea! Sobran ya todas las palabras inútiles. ¡Vamos, pues!
En España suelen producirse un par de casos al año, como el de Paqui de Santomera o el más reciente y famoso Bretón de Córdoba. Sobre este último caso resulta relevante la manifestación del comisario que llevó la investigación.
Este vídeo de Antena 3 recoge la entrevista con el comisario Serafín, que llevó la investigación. Lo pueden ver en el minuto 1:14 s que recogemos en el siguiente extracto.
¿Qué pretendía hacer? Si Ruth no se avenía a la reconciliación, como lo ha dado ya por perdido, castigar a Ruth. ¿Cuál es el mayor castigo que se le puede dar a una madre? La separación para siempre de sus hijos...
Las feminazis lo saben y sus deseos de separar a los hombres de sus hijas, está tan enfermizamente arraigado en sus cerebros que han luchado por conseguir ese privilegio para la mujer, y lo han conseguido, haciendo de las instituciones españolas organizaciones de amparo, por acción u omisión, al maltrato infantil por alienación parental.
Como vemos, han pasado muchos cientos de años, pero la naturaleza humana no parece haber cambiado demasiado, salvo que ahora, este tipo de fenómeno se fomenta desde las instituciones del estado, no el crimen en sí, pero sí otra forma de maltrato que mantiene la misma esencia de usar al menor contra el otro padre, no matándolo físicamente, pero si matando el vínculo emocional que existe entre ellos.
Hay un magnífico libro editado por Francisco Martinez Pardo, Jefe de Servicios de Agudos de del Hospital Psiquiátrico Román de Alberca de Murcia, titulado Informe y peritajes psiquiátricos, Narcisismo maligno, el joven de la catana, y Síndrome de Medea la parricida de Santomera. Trata de este complejo o síndrome de Medea. Ese libro recoge la siguiente afirmación de los autores del término de Medea, cuando dice:
"Las modernas Medeas no desean matar a sus hijos, pero si quieren venganza de sus ex-esposos y lo logran destruyendo la relación entre el otro progenitor y el niño. El moderno Síndrome de Medea se inicia con el matrimonio en crisis y la separación subsiguiente.
Un niño puede ser utilizado como agente de venganza contra el otro progenitor ... o la rabia puede incluso conducir al robo del niño. son padres o madres vengativas que liberan su intensa ira utilizando al niño contra el otro progenitor
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