Teodoro, víctima del fundamentalismo justiciero de género español.

Teodoro ha estado más de tres año en prisión, por una denuncia falsa o infundada de violación a su propio hijo, de las que no existen, porque no se persiguen y que resultan muy eficaces para que una despechada y amante madre, se vengue del padre.

Medea mató a sus hijos, para vengarse del padre. Ahora, el fundamentalismo de género, ha institucionalizado otra forma de venganza hembrista: la falsa denuncia para vengarse del padre. Falsa denuncia que no existe, según dicho fundamentalismo.

Entendemos por fundamentalismo aquel que, en terminología de Gustavo Bueno, consiste en admitir la existencia de un ideal perfecto, de tal manera que las imperfecciones reales no le afectan ya que son simples impurezas de la vida que no trascienden al ideal.

Los detalles recogidos en la prensa los podéis ver al final de la página.

Los detalles de lo ocurrido están aquí: Detalles Judiciales

Ahora pide indeminización mínima de 2 millones de €, por parte del atropello sufrido

El caso en la prensa

Estos son los detalles en la prensa del caso:

El TS pone fin al calvario de Teo, acusado en falso por su exmujer de violar a su hijo

Tres años entre rejas por una 'falsa' acusación de su exmujer

En libertad tras pasar tres años en la cárcel acusado de abusar de su hijo

Nos duele la incredulidad de los que rechazan una parte de la realidad porque no se ajusta las ideas fundamentalistas de género vigentes que, olvidando el carácter racional del ser humano, utilizan su cerebro como los borregos, aceptando sólo aquello que encaja en sus principios fundamentalistas. Para ellos, la duda, signo de inteligencia humana, es un proceso mental que tienen bloqueado.

A todos las víctimas de la formación fundamentalista de genero: dos ideas simples:

1. Las motivaciones de este tipo de criminales se conoce desde que Eurípedes escribió su obra trágica, Medea (Μήδεια, Mēdeia) representada por primera vez el el año 431 antes de Cristo. En ella Medea, mata a sus hijos para vengarse del padre que le había dejado por otra mujer. Los ignorantes fundamentalistas de género, ignoran que ya desde el año 431, esta forma de actuar es conocida como Síndrome de Medea, tal como se conoce el Complejo de Edipo o de Electra, ninguno de ellos descritos en los manuales de trastornos mentales..., como la psicopatía que no es ninguna enfermedad.

2. El caso Bretón es un claro exponente de esta forma perversa de pensar y actuar y de lo que es más relevante: de la capacidad de un comisario de captar, con sus sentidos, la esencia de ese crimen.

Está claro que ese daño que pretende es a la madre, no a los hijos. Los hijos son un instrumento para hacer daño los hijos. El daño a los hijos les resulta irrelevante a estos criminales. Además, tenemos una pregunta clave

¿Qué tenía Bretón contra sus hijos?

Obviamente nada. Parece claro para cualquier mente racional, que parece no es el caso de la juez que le juzgó... el padre carecía de otro motivo que no fuera el de hacerle el máximo daño a su ex-, sin importar el precio. Desgraciadamente este no es ni el primer caso ni el último.

Ver en Antena3 y en ABC, dos muestras de la antología de la estupidez humana y de la ignorancia, incapaces de ver a un elefante frente a sus narices, salvo que lo esté denunciando en la tele...

Agradecimientos

Agradecemos a SOS Papá, habernos cedido los videos que hemos usado para ilustrar este gran crimen de género, cometido desde la propia Administración del Estado, con el resultado de:

• Padres inocentes condenados

• Hijos maltratados emocionalmente, por jueces, psicólogos y servicios sociales

• Padres e hijos que ven interrumpidas de forma cruel e inhumana por las cloacas del estado, vulnerando el artículo 8 del Tratado Europeo de Derechos Humanos

Esta es la España de la vulneración de derechos fundamentales.

Una última pregunta:

• ¿Cuánto dinero de los contribuyentes se emplea en el maltrato familiar y de género?