La Solución

Esto no es nada nuevo. Lo llevamos viendo desde principio de siglo y cada vez va a peor, ya que el movimiento feminazi ha infectado todas las instituciones y da votos, que son los que al final alimentan todo este maltrato.

La solución pasa por partidos como Vox que luchan sin tapujos por destapar todo este fraude político.

Pero para que Vox pueda operar necesita nuestro voto, con lo que al final, esto es una cuestión del ciudadano.

Hubo un tiempo en que Ciudadanos también señaló este problema, pero Ciudadanos viró y ahora es como el PP, que nunca ha estado a favor de esto pero que ha adaptados sus principios al voto que proporciona el aparato feminazi.

Es simple. Gustará o no, pero es así de simple Hoy.

Haciendo memoria

No olvidemos que Julio Bronchal, ya advertía a todos de esta barbaridad, porque ni es la primera, ni será la última, calculo que habrá miles de inocentes condenados por denuncias falsas, o infundadas, por violencia de género, en su variante de denuncia de abuso sexual, hecha por uno de los progenitores contra el otro, una vez divorciados.

Garantías que se nos niegan y que favorece la implantación de la justicia fundamentalista de género

Julio Bronchal, nos da una clase magistral, sobre garantías psicojurídicas que no vemos y que tanto favorece la condena de inocentes, el maltrato infantil y la rotura de las relaciones familiares entre padre e hijo.

Merece la pena escucharle.

Si. Necesitamos garantías procesales. Esas que todos dicen que tenemos y que brillan por su ausencia.

Hay que entender que hoy, los psicólogos hacen el trabajo sucio para condenar a inocentes, y hacer una realidad todo lo que nos cuenta la propaganda de género, que proporciona el alarmismo irracional necesario para justificar el desvío de fondos para este tipo de actividades, tal como ya han denunciado los de Vox: los chiringuitos de género.